Este chiste me llegó por varios sitios el miércoles pasado, cuando salió en todos los medios de comunicación que
2 de cada 3 estadounidenses se muestran contrarios a que se exhibiera un desnudo integral en la televisión y que la misma proporción estaban a favor de ver retransmitida una ejecución en la silla eléctrica.
A propósito del tema, varias bitácoras compañeras llevan días escribiendo al respecto, porque todo este
puritanismo que está recorriendo Estados Unidos surgió a partir del destape de Janet Jackson en la
Superbowl:
Malos Pensamientos y
Por la Boca muere el Pez, además de en
Reflexiones e Irreflexiones, donde se analiza qué ocurre cuando la dices al
Google que busque la
perniciosa palabra
teta. La censura ha llegado a los Oscars, que también se emitirán en falso directo y se prevé que sean los más recatados de los últimos tiempos.
Mostrar el cuerpo desnudo es un acto inmoral, pero matar a la gente (ya sea en la silla eléctrica o con bonitos fuegos artificiales sobre Irak) debe verlo todo el mundo.
¿Alguien lo entiende?
Si de verdad tuvieran que prohibir algo en ese país tendrían que ser las armas, pero como siguen pensando que viven en el Salvaje Oeste...