Chula, ¿verdad? Es una de las últimas imágenes públicas del
Telescopio Espacial Hubble, HST, con la
Cámara Avanzada de Muestreo (ACS) y la verdad es que tiene muchas cosas que contar. Casi todo lo que vemos ahí son galaxias lejanas, algunas muy muy lejanas, lo que nos hace reflexionar sobre lo
enorme que es el universo (mirar las
reflexiones de rvr de hace unos días).
Los colores nos dicen muchas cosas: como siempre en este tipo de imágenes, los azules representan formación estelar, estrellas jóvenes, masivas, azules y muy brillantes; mientras que los colores rojos son las zonas más viejas, estrellas más evolucionadas y frías.
Fijaros en la galaxia roja del medio de la imagen: tiene un
rayo curvado azul en la parte superior. No es arañazo del negativo (ejem) ni nada artificial: es algo muy real. Estamos viendo una
lente gravitatoria. El arco azul es en realidad la luz amplificada de un objeto mucho más lejano que esta galaxia roja en primer plano. Como la teoría de la Relatividad General de Einstein predice, la luz se ve efectada por la gravedad: al pasar cerca de un objeto masivo (una galaxia grande o un cúmulo de galaxias) se desvía de su trayectoria
rectilínea. En verdad, la galaxia roja está actuando de
lupa para ver lo que hay detrás. Eso sí, como esta lupa no es perfecta, en lugar de tener una imagen clara tenemos una cosa desenfocada y amorfa (en óptica se diría con aberración).
Pero yo me sigo quedando con la galaxia amarillita que está algo por debajo, sí, ésa que tiene una extraña y tenue cola hacia la derecha. Será
degeneración profesional, porque llevo todo el día (diría mejor, todo el mes) peleándome con mi
galaxia-dinosaurio (como Lola lo ha bautizado)
Mrk 1087, que tiene no una de estas colas, sino 4 al menos. Las interacciones de galaxias, la formación jerarquizada de galaxias, la formación estelar inducida por estas interacciones... en fin, mejor me voy a la cama.